La abasia se define como la incapacidad de mantenerse de pie y, como consecuencia, de caminar.
Esto puede aparecer a causa de trastornos neurológicos u otras enfermedades que puedan alterar la marcha.
También puede deberse al miedo o fobia a caminar.
En muchos casos, sobre todo en ancianos, ocurren caídas que les provoca miedo y, por tanto, rigidez a la hora de caminar.
Esta rigidez hace que se provoquen más caída y, como consecuencia, se incrementa la fobia.
Por consiguiente, aumenta el riesgo de sedentarismo, lo que puede generar atrofia muscular y con ello el impedimento de andar.
Para ambos casos, existen tratamientos que pueden acabar con la abasia.
Por un lado, el tratamiento físico, mejorando los reflejos y recuperando la confianza.
En el caso de la fobia, es necesario un tratamiento psicoterapéutico.
Además, también debemos tener en cuenta el entorno del hogar.
Es importante, sobre todo en este caso de personas mayores, evitar caídas que puedan provocar daños físicos y más miedo a caminar.
Podemos contar con apoyos externos y retirar objetos no necesarios que puedan dificultar el camino entre estancias y dentro de ellas.
También mantener una buena iluminación y utilizar zapatos con suela antideslizante.
Por último, realizar ejercicio adaptado a sus necesidades.
Gracias a esto, podemos tratar esta incapacidad y mejorar su calidad de vida.
Desde SeniorDomo mantenemos la firme idea de que las personas mayores deben seguir activas física, mental y socialmente.
Con nuestro reloj localizador de personas mayores pueden disponer de una protección preventiva las 24h. en cualquier lugar.
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