Los pisos adaptados ayudan en el día a día de personas con movilidad reducida.
El edificio tiene servicios adaptados a las necesidades de movilidad y accesibilidad de las usuarias y los usuarios. Según las características de las personas dependen de unos soportes u otros y las ayudas que necesiten variarán, igual que los pisos.
Los pisos tienen en el edificio espacios comunes, para que puedan mantener su vida social activa junto con los demás participantes.
En algunos casos, si la dependencia es muy severa o si la persona tiene muchos riesgos para hacerse daño, tienen cuidadores que están pendientes de ellos y de sus entradas y salidas del edificio.
Algunas partes de la casa tienen aparatos de detección de caída, que acostumbran a ser habitualmente, el baño y el dormitorio.
Todo está pensado para hacer la vida de estas personas más fácil. Intentan que la persona pueda ganar un poco de autonomía con los aparatos de soporte que hay por todo el apartamento.
La existencia de grúas en los pisos proporciona una muy buena ayuda a las y los profesionales para hacer traslados sin tener que hacer un esfuerzo físico muy grande.
Las nuevas tecnologías también están muy presentes. Las puertas del domicilio pueden abrirse con sólo acercarse a la puerta con un sensor. Sin tener que acercarse a la puerta de entrada para nada, pueden ver a través de una pantalla quién llama a la puerta.
Los pisos adaptados dan seguridad a las y los usuarios y también a sus familiares al saber que están pendientes de ellos las 24 horas del día.
Desde SeniorDomo mantenemos la firme idea de que las personas mayores deben seguir activas física, mental y socialmente.
Para más información sobre nuestra solución de teleasistencia contacta con nosotros haciendo click aquí.
