Durante el envejecimiento surgen algunos cambios corporales y que hacen que la higiene en la tercera edad sea más importante.
A cualquier edad es importante mantener una buena higiene, pero en la vejez hay que incidir más en estos cuidados.
Unos buenos hábitos de higiene pueden mejorar la salud que, en esta etapa, suele ser más delicada.
La higiene en la tercera edad se centra sobretodo en la piel, los pies, la boca, etc. Lo explicamos con detalle a continuación.
Es un error centrarse en las arrugas como problemas de la piel en la vejez. Su cuidado tiene que centrarse en que pasa a ser más frágil.
Los medicamentos, medio ambiente…o solo con el hecho de envejecer, la piel pasa a ser más fina o, por lo tanto, más delicada.
Además, la regulación de la temperatura cambia y, por eso, tienen más tendencia a enfriarse.
Por eso, es importante mantener un buen cuidado de la piel, que se mantenga hidratada y se protejan del frío.
Los pies son otra parte a tener en cuenta en la higiene de los mayores. Suele ser una extremidad con riesgo de coger infección, como hongos por ejemplo.
También es importante una buena higiene bucal. En este post os lo explicamos con más detalle.
Lavarse las manos es muy importante, ya que puede disminuir el riesgo de coger enfermedades o transmitirlas.
En todo caso, la ayuda de un cuidador puede facilitar estas tareas y la vida diaria en general.
Mantener una buena higiene no solo ayuda a prevenir enfermedades y deterioro, sino que también ayuda a mejorar la sensación de confort y bienestar.
Además, aporta gran relajación con lo que el descanso también se ve mejorado.
También resulta favorecedor para la mejora de la circulación.